En la actualidad, debido a los cambios económicos políticos y culturales como sociales, se necesitan profesionales con un gran espíritu emprendedor capaces de innovar, de solucionar problemas con eficacia, mantener una actitud positiva y evaluar los riesgos que una determinada actividad económica pueda contraer.
Considero que todos como estudiantes de nuestra Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de Los Andes (ULA), así como de otros centros de formación profesional debemos ser conscientes de nuestras capacidades cognitivas y desarrollarlas, pero sólo eso no basta, también es necesario desarrollar el potencial de nuestra mente para crear, innovar, ser independiente y líder, teniendo una visión emprendedora. La idea se trata de proyectar en el futuro lo que queremos hacer y como lo queremos hacer y pensar en las necesidades y dificultades que tendríamos para desarrollar distintos proyectos teniendo en cuenta los cambios tecnológicos, económicos y factores sociales como políticos.
Materano Willian, Ruiz Lidia, Torres CLaudia, y Valera Anne presentan una investigación que busca indagar acerca de la actitud de los estudiantes, profesores y egresados sobre la formación empresarial en la carrera de Ingeniería Agrícola del Núcleo Universitario “Rafael Rangel” de la ULA.
Los autores señalan que el espíritu emprendedor es enseñado a través de la educación empresarial, y que las universidades como entes sociales, tienen la misión de formar recursos humanos calificados para asumir la responsabilidad esencial de contribuir al desarrollo social y económico del país.
De manera, que la formación empresarial más que brindar al ser humano las capacidades y habilidades de un espíritu emprendedor, se trata de hacer despertar de alguna en el estudiante ese espíritu emprendedor.
Para llevar a cabo la investigación los autores utilizan los siguientes indicadores de espíritu emprendedor: creatividad, necesidad de poder, el locus de control, necesidad de logro, autonomía e independencia, seguridad emocional, perseverancia y percepción de riesgos.
Mediante unas encuestas aplicadas a un número de estudiantes, profesores y egresados obtuvieron que la actitud de los mismos es de nivel bajo, ante la tenencia de un espíritu emprendedor en la carrera de Ingeniería Agrícola.
También dieron a conocer la actitud de los estudiantes y profesores ante cada tipo de indicador, teniendo como resultado que no se encontraron diferencias significativas en la actitud de los estudiantes, profesores y egresados para los indicadores creatividad, seguridad emocional, autonomía, necesidad del logro, perseverancia, optimismo y capacidad de organización.
Por otra parte, querían conocer la actitud con respecto a cada indicador. Esto dio como resultados diferencias significativas entre los indicadores de autonomía e independencia del resto de los indicadores
En el análisis, determinaron que los estudiantes, profesores y egresados consideran a bien, la formación del Ingeniero Agrícola, pues les permite ser independientes y, a la vez, tener iniciativa en la búsqueda de nuevas experiencias de auto realización y desarrollo.
Termino esta reflexión, acotando que el espíritu emprendedor sólo puede darse en un contexto de libertad, pero condicionado por una serie de factores, tanto internos como externos. Ello significa, que no basta tomar en cuenta la creatividad que se tenga, el riesgo que se quiera afrontar, el conocimiento, la formación, los valores, sino que hay que considera el medio ambiente, las normativas, las regulaciones del estado, la competencia, el mercado, entre otros aspectos.
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